GRIFO
Del griego gryphos proveniente a su vez
del persa shirdal = león-águila; algunas variantes lingüísticas se refieren a
los grifos como: gryphon, griff, griffen, griffon, griffoun, griffun, griffyn,
grifon, grifyn, grefyne, gríobhán, gryffen, gryffin, gryffon, gryfon, gryf,
gryphen y gryphin, entre otros. Los grifos son seres mitológicos con cabeza,
pico y alas de águila, mientras que el resto de su cuerpo es de león y, en
algunas ocasiones con cola de serpiente. El plumaje alrededor de su cabeza,
cuello, pecho y cola es dorado, mientras que el resto de su piel es de león.
La creencia en estos seres se remonta
al antiguo Egipto alrededor del 3300 a.C; sin embargo, hay quienes afirman que
son más antiguos y existen referencias en las culturas babilónica, asiria y
persa. Plinio el Viejo creía que los grifos provenían del norte de Rusia;
Esquilo, por su parte, pensaba que provenían de Etiopía, mientras que Bulfinch
afirmaba que sus orígenes se encontraban en India. Heródoto, por su parte,
creía que la leyenda del grifo provenía del pueblo mítico del los Isedones que
vivían en los Montes Urales.Existe, sin embargo, una teoría donde el origen
real del grifo puede encontrarse en los restos fósiles de dinosaurios de la
familia Ceratopsidae (cuyas características físicas coinciden con la
descripción del grifo mitológico) hallados en los desiertos de Asia Central, en
especial en Mongolia.
Dado que, para muchas culturas
antiguas, el león era considerado el rey de las bestias y el águila la reina de
los aires, entonces se entiende que el grifo fuera considerado como una
criatura especialmente majestuosa y poderosa. Se decía también que el grifo era
tan rápido como el águila y tan feroz y majestuoso como el león. Sus enemigos
naturales sólo eran los caballos, pero también algunas serpientes y basiliscos
podían convertirse en sus enemigos en la medida que estos personificaran
fuerzas malignas.
Se creía además que vivían en grupos de
entre 5 y 30 seres con una organización jerárquica muy similar a la de los
leones, donde el más grande y viejo es la cabeza de la manada. Conforme a un
documento escrito en el siglo IX por el irlandés Stephen Scotus, los grifos son
monógamos e incluso, si un miembro de la pareja muere, el otro grifo pasará
sólo el resto de su vida sin necesidad de buscar un nuevo compañero. Por otro
lado, los hábitos de la hembra fueron descritos por Santa Hildegarda de Bingen
en el siglo XII, quien afirmaba que la grifo hembra buscaba una cueva donde
pudiera poner a salvo sus tres huevos y cuidarlos hasta que éstos eclosionaran.